El Embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, se despidió este lunes de su cargo, destacando la cooperación binacional que impulsó durante su gestión. Afirmó que siempre hubo coordinación y comunicación con México, y aseguró no arrepentirse de sus polémicas declaraciones sobre temas como la Reforma Judicial y la estrategia de seguridad.
Ken Salazar, quien asumió el cargo de embajador en septiembre de 2021, ha sido una figura clave en la diplomacia entre Estados Unidos y México. Durante su gestión, se enfocó en fortalecer la relación bilateral en áreas como la seguridad, la economía, la migración y la cultura. Salazar ha sido conocido por su estilo franco y directo, lo que en ocasiones generó tensiones, pero también permitió abordar problemas complejos con transparencia.
En su despedida, Salazar enfatizó el respeto y la admiración que siente por el pueblo mexicano y su soberanía. “Yo le tengo mucho respeto a la gente mexicana y a la soberanía de México. Le tengo un respeto grande, como siempre, a Andrés Manuel López Obrador y también a la Presidenta Claudia Sheinbaum”, expresó. Además, destacó los logros alcanzados durante su mandato, como el avance en la cooperación en materia de seguridad y la creación de un sistema de migración más ordenado y humano. Salazar mencionó que, aunque el sistema actual está "quebrado" tras décadas de inacción, confía en que la nueva administración traerá tiempos diferentes.
Durante su gestión, Salazar trabajó estrechamente con el gobierno mexicano para abordar temas críticos. Su enfoque en la seguridad compartida y la prosperidad económica fue destacado como un modelo de colaboración binacional. En comparación con embajadores anteriores, Salazar se distinguió por su disposición a abordar temas controvertidos de manera abierta, lo que generó tanto elogios como críticas.
La despedida de Ken Salazar marca el fin de un período significativo en la diplomacia entre Estados Unidos y México. Su gestión se caracterizó por un enfoque directo y colaborativo que permitió avanzar en áreas clave para ambos países. Salazar se va con la satisfacción de haber contribuido a fortalecer la relación bilateral y con la esperanza de que su sucesor continúe construyendo sobre los logros alcanzados.
En la reunión de despedida, Salazar presentó a Mark Johnson, quien asumirá el puesto de encargado de negocios mientras llega el próximo embajador. Johnson, con más de 20 años de experiencia en el servicio diplomático, es una figura conocida en México y tendrá la tarea de dar continuidad a los trabajos diplomáticos entre ambas naciones. Salazar también resaltó la importancia de la continuidad en los esfuerzos bilaterales y expresó su confianza en que la relación entre Estados Unidos y México seguirá fortaleciéndose en el futuro.