El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, sostuvieron un encuentro bilateral en el marco de la cumbre de los BRICS que se celebra en la ciudad rusa de Kazán. Putin destacó a Venezuela como "uno de los viejos y fiables socios de Rusia en América Latina y en el mundo en general" y expresó su apoyo a las aspiraciones de Venezuela de unirse al bloque de economías emergentes. La reunión se celebró en el contexto del deseo de ambos países de seguir fortaleciendo sus lazos políticos, económicos y culturales.
Durante la reunión, Putin reconoció la importancia de los lazos que unen a ambos países, resaltando la cooperación en múltiples áreas, incluidas la energía, la industria farmacéutica, el transporte y el desarrollo espacial. El presidente ruso subrayó que la colaboración con Venezuela tiene como objetivo forjar un nuevo orden mundial más justo, oponiéndose a la presión política y financiera externa. Además, destacó la importancia de establecer relaciones financieras basadas en el uso de monedas nacionales, como un mecanismo para reducir la dependencia de economías extranjeras.
El encuentro entre Maduro y Putin se produce en el segundo día de la XVI Cumbre de los BRICS, que se lleva a cabo del 22 al 24 de octubre. Los BRICS, un grupo originalmente formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, recientemente incorporó a Irán, Etiopía, Emiratos Árabes Unidos y Egipto. Aunque Venezuela había manifestado su interés en formar parte del grupo, no fue incluida en esta última ronda de adhesiones debido a la solicitud de Brasil.
Maduro destacó la importancia de la participación de Venezuela en este tipo de foros internacionales y la consideró un hito histórico, ya que es la primera vez que un presidente venezolano asiste a una cumbre de los BRICS. Aseguró que Venezuela comparte los principios de los BRICS y busca contribuir a la construcción de un mundo multipolar, donde todos los países tengan derecho a igualdad, libertad y prosperidad. Además, Maduro celebró la inversión rusa en Venezuela y subrayó el compromiso de su país con la recuperación económica, asegurando que está dispuesto a seguir recibiendo inversión y fortaleciendo las relaciones comerciales con Rusia.
La reunión entre Putin y Maduro refleja la voluntad de ambos países de profundizar una relación que, históricamente, ha sido clave para el fortalecimiento de sus respectivas economías y para su posicionamiento en el ámbito internacional. La cooperación entre Rusia y Venezuela ha sido una respuesta conjunta a las sanciones impuestas por Occidente, especialmente a raíz del conflicto en Ucrania y la crisis política y económica en Venezuela.
Desde una perspectiva geopolítica, el interés de Rusia en apoyar a Venezuela para ingresar a los BRICS radica en su deseo de incrementar la influencia del bloque en América Latina y de sumar países afines a sus posturas en contra de la hegemonía occidental. Por su parte, para Venezuela, formar parte de los BRICS representaría un respaldo estratégico que le permitiría mejorar sus capacidades económicas y acceder a nuevas oportunidades de cooperación y desarrollo.
El presidente venezolano también aprovechó la cumbre para mantener reuniones con otros líderes internacionales, como el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko; el primer ministro de Etiopía, Abiy Ahmed; y el presidente de Palestina, Mahmud Abbás. Estas reuniones buscan reforzar las relaciones bilaterales y promover la cooperación con otros miembros del grupo.
La cumbre de los BRICS de 2024 marca un hito importante para las relaciones entre Rusia y Venezuela. Con el apoyo expreso de Putin, el país sudamericano podría tener una oportunidad futura de integrarse a este bloque de economías emergentes. Aunque Venezuela quedó fuera de la última ronda de adhesiones, la voluntad de ambos líderes de seguir cooperando muestra un camino abierto hacia la integración y el fortalecimiento de sus lazos bilaterales, en un contexto global marcado por las tensiones políticas y la búsqueda de un nuevo equilibrio de poder en el ámbito internacional.
