En la actualidad, las relaciones amorosas experimentan transformaciones significativas. Una nueva tendencia conocida como "Banksying" ha surgido entre los jóvenes, describiendo un comportamiento específico dentro de las relaciones que puede beneficiar a uno, pero causar dolor al otro.

El término "Banksying" ha ganado popularidad para definir una dinámica en la que una persona en la relación se retira emocionalmente, buscando estabilidad personal, mientras que la otra puede sentir abandono o sufrimiento. Esta tendencia refleja cómo las relaciones modernas están adaptándose a nuevas formas de comunicación y expectativas emocionales.

La aceptación de diversas formas de amor, como la monogamia y el poliamor, muestra que las parejas ahora eligen conscientemente cómo quieren relacionarse. Sin embargo, "Banksying" resalta un desafío: el equilibrio entre el bienestar individual y la conexión emocional con la pareja.

Expertos en psicología sugieren que esta práctica puede estar ligada a un deseo de protegerse emocionalmente o buscar una mayor autonomía dentro de la relación. Sin embargo, advierten sobre el impacto negativo en la persona que no recibe la misma reciprocidad emocional, lo cual puede generar inseguridades y conflictos.

A medida que las dinámicas de las relaciones continúan evolucionando, el diálogo abierto sobre expectativas y necesidades emocionales se vuelve esencial para evitar malentendidos y fortalecer la conexión entre parejas. "Banksying" es un ejemplo de cómo las nuevas generaciones están redefiniendo el amor y la comunicación, desafiando las normas tradicionales.